Un té verde, hojas de menta y un aroma a menta natural le dan a esta mezcla muy aromática un increíble poder y frescura. Un té de bienvenida icónico para el pueblo bereber, es costumbre beber tres tazas de este té seguidas como un signo de gratitud y cortesía. De acuerdo con la tradición, se sirve muy caliente y muy dulce.